Los
conflictos en torno a la subcontratación están a la orden del día en Beauchef. Pésimas
condiciones laborales, despidos arbitrarios, malos tratos, prácticas anti
sindicales, no cumplimiento de derechos laborales básicos y un largo etcétera
que incluye lo que parece ser una escasa voluntad de parte de las autoridades
de tal espacio por enfrentar y solucionar la problemática.
Además, el fenómeno parece ser
transversal, no sólo respecto a nuestra casa de estudios, sino al ambiente
universitario en general, y está fuertemente imbricada con la discusión en
torno a la democratización que nuestra comunidad universitaria empieza a
desarrollar, y que tantos resquemores ha suscitado en otros espacios.[1]
Es por ello que el pasado 20 de
abril nos reunimos a conversar con la Comisión Subcontrato de la Facultad de Ciencias
Físicas y Matemáticas (FCFM) de la Universidad de Chile: organización
estudiantil que ha visibilizado este conflicto y que entre otras cosas ha
conseguido que la Facultad de Ciencias Sociales (FACSO) realice un estudio (en
curso) sobre el trabajo subcontratado[2].
Nos interesa dar a conocer la actividad que han venido realizando, la historia del conflicto y sus proyecciones
para el escenario actual. A continuación la conversación que Felipe Ruiz,
miembro del GEIT FACSO[3]
sostuvo con Alex Echeverría, miembro de la Comisión Subcontrato FCFM. Una versión descargable de la entrevista, originalmente publicada por el GEIT, la podrán encontrar en el siguiente link (click acá).
Por: Felipe Ruiz Bruzzone
felipe.ruiz@ug.uchile.cl [4]
felipe.ruiz@ug.uchile.cl [4]
F: ¿Cómo
presentarían a la Comisión Subcontrato FCFM? ¿Quiénes son ustedes?
A: Somos una
comisión del Consejo de Estudiantes de Facultad (CEF) - el consejo de
estudiantes es la instancia donde se reúnen todos los centros de estudiantes de
ingeniería y es el espacio donde se toman decisiones a nivel de ingeniería - y
su función es ver todas las temáticas de la subcontratación, y solucionar los
problemas de condiciones laborales que afectan a estos trabajadores.
F: ¿Qué
problemática intentan encarar al interior de la facultad?
Todo lo
relacionado con condiciones laborales del personal subcontratado y el personal
recientemente internalizado por la facultad (seguridad), eso tiene que ver con
temas de sueldo, de tratos etc. Nosotros partimos entendiendo el problema - qué
es la subcontratación y cómo vive la persona subcontratada - y haciendo un
diagnóstico de más o menos lo que eso implicaba. Más que todo, la idea era
empezar a proponer soluciones a las problemáticas a través de lugares
institucionales, como puede ser la mesa triestamental que nosotros levantamos.
Entonces no es solamente una instancia donde nosotros queremos evidenciar
problemas, sino también queremos transformar realidades.
F: ¿Cómo se
ha desarrollado la conflictividad en torno a la externalización de servicios en
la Universidad de Chile en general, y en la FCFM en particular, desde una
perspectiva histórica?
A: Lo que
nosotros sabemos, es que la subcontratación acá en la Universidad de Chile,
nace más o menos en el año 1996 con el decano- que posteriormente fue rector -
Víctor Pérez, en función de externalizar todos los servicios que "no eran
parte del quehacer universitario". Entonces, se comenzó a externalizar lo
que es aseo, jardinería, seguridad y alimentación.
De ahí, no
tenemos muchos más antecedentes hasta el momento en que empezamos a ser
estudiantes, y más o menos en el año 2010, distintas personas que estaban
estudiando acá en la facultad, se dan cuenta de que había varios conflictos:
con los pagos y concretamente con los malos tratos que ejercía una supervisora
hacia las trabajadoras. Éste último fue el primer hito de organización acá: se
organizaron las trabajadoras, hicieron asamblea, y le pidieron al vicedecano
que intercediera para poder sacar a la supervisora. En ese tiempo la
coordinadora no existía, y tales acciones son ejemplo de actividades aisladas,
no centralizadas a través del centro de estudiantes de la facultad.
La idea de
formar esta comisión nace en una coyuntura: el año 2013 la empresa que estaba a
cargo del área de guardias quiebra y deja a todos los empleados botados.
Entonces empiezan a aflorar todos los chanchullos que hacían las empresas y
todos los malos tratos que no se habían sabido nunca: por ejemplo que los
trabajadores estaban aquí, días enteros trabajando; que recibían malos tratos;
que no se les respetaban sus sueldos, no se les pagaba a tiempo. Desde ese año,
el 2013, empezamos a trabajar en una serie de foros, empezamos a concientizar a
la gente, pero nuevamente era un trabajo de "gente motivada", al
nivel del centro de estudiantes de ingeniería; hasta que en octubre de ese año (2013) sale la idea de tratar este tema seriamente
y de una forma integral, superando el tratamiento de los problemas
coyunturales, y buscando darle una solución integral y de largo plazo al
problema de la subcontratación. Eso es algo que no se había abordado hasta ese
momento y que es importante en la orientación de la comisión.
F: Porque
el problema en definitiva no son los conflictos coyunturales, sino la
subcontratación como modelo de relaciones laborales al interior de la
facultad...
A: Sí. Sin
embargo, uno de los temas importantes que nosotros hemos querido llevar a cabo
en esta comisión, ha sido darle una solución a la problemática en conjunto con
los estudiantes. Por tanto, nosotros sabíamos que existe un conflicto y que hay
que solucionarlo, pero si el problema era la subcontratación, o cuál era el
modo de abordarlo, a priori no fue el trabajo de la comisión determinarlo. Como
Comisión Subcontrato no nacimos con la idea de acabar con el subcontrato, sino
que con la idea de que como estudiantes demos una solución a los problemas de
la subcontratación, cuestión que es diferente.
Entonces,
en el año 2013 comenzamos a formalizar el trabajo, se forma el grupo, que
básicamente continuamos siendo la misma gente, y empezamos a formular un plan
de acción. Ese plan de acción implica lograr construir un diagnóstico
preliminar, entender el problema con los estudiantes a través de las asambleas,
proponer una solución en un espacio legitimado institucionalmente - que a lo
largo fue la mesa triestamental - y después ver cómo a largo plazo le damos una
solución integral al problema. En esa línea más adelante salió la idea de
efectuar un estudio, la propuesta de internalización de guardias y finalmente
en lo que estamos ahora: encarando conflictos en el ámbito del aseo.
F: ¿Qué
acciones (y eventuales objetivos políticos) han logrado concretar mediante la
organización de los/as estudiantes y la articulación con el personal
subcontratado de la facultad?
A: Como
hablábamos, nuestros objetivos políticos
son terminar con la subcontratación y proponer una solución a largo plazo que
implique asegurar las condiciones laborales de los trabajadores. La idea es que
no haya subcontratación, ahora, la manera de terminar con ello, es un tema que
hay que abordar; por ejemplo, está la contratación directa, se ha hablado
algunas veces de instalar cooperativas. Hay
un marco de ideas que pueden evaluarse, pero nosotros ya sabemos que la
subcontratación no es la solución.
F: Y
políticamente, ¿qué es lo que han logrado con el accionar de esta organización
estudiantil que se propone encarar el problema?
A: O sea,
tenemos dos ámbitos fuertes: la organización de los trabajadores - que ha sido
un conflicto constante - y el ámbito estudiantil. Respecto a las y los
trabajadores, nosotros hemos trabajado fuerte el potenciar su auto organización.
Como estudiantes siempre hemos estado en una especie de
"asistencialismo", entendido como que nosotros llegamos y proponemos
soluciones, e intercedemos para que los trabajadores tengan mejores condiciones
de trabajo. Lo que pretende políticamente la comisión es que estos trabajadores
se organicen para que por sí mismos propongan soluciones y generen las
instancias de presión suficientes para que se solucionen sus problemas. Eso se
ha ido evidenciando y trabajando a través de los años, y hemos tenido avances
parciales. El año pasado logramos organizar distintas instancias de
organización de los trabajadores pero la dinámica misma de la subcontratación,
la facilidad que tiene el empleador para mover y/o despedir a los y las
trabajadores/as dificulta un poco el
contexto.
Por el otro
lado está el trabajo político que llevamos a cabo con el estudiantado, porque
entendemos que tampoco puede haber asistencialismo con los estudiantes;
nosotros no llegamos a decirle a nuestros compañeros "esto es lo que hay
que hacer, sígannos", sino que nuestro trabajo político apunta a cómo las
bases estudiantiles entienden el problema. Nosotros partimos dando un
diagnóstico a los estudiantes a través de las asambleas, y en función de eso
realizamos instancias de discusión en las asambleas de cada centro de
estudiantes. Hicimos la pega de ir a cada centro de estudiantes - de las once
que hay acá -, mostrarles el problema, generar una instancia de discusión que
duraba una o dos horas para que ellos entendieran que esto es importante.
Cuando eso se lograba, la capacidad de organización pasaba a ser algo
espontáneo. Al principio, en mayo de 2014 tuvimos una concentración donde
llegaron cincuenta personas, que eran quienes estaban en las distintas
asambleas de carrera (CCEE) y sabían perfectamente lo que estaba pasando, y
estaban organizados en pos de eso: nosotros no estábamos invocándolos a nada,
ellos sabían lo que había que hacer y cómo organizarse en pos de eso. El trabajo en asambleas que te contaba, y
la concientización, hizo que los estudiantes fueran aumentando en cantidad: en
la última concentración que tuvimos, cuando nuevamente tuvimos que interpelar
al decano por un problema, llegaron como doscientas cincuenta personas.
F: ¿Y cómo
ha sido el proceso respecto a la organización de las/los trabajadoras/es? ¿Han
logrado el objetivo de la auto organización como con el estudiantado?
A: De
repente se ha logrado. Pero como te decía, es súper conflictivo. Respecto a los
estudiantes, están siempre acá, y por más que digan algo no van a salir volando;
me refiero a que los estudiantes no
pueden ser sacados de la facultad sin un sumario interno, tienen ciertas
seguridades. Eso no pasa con las/los trabajadoras/es y en especial con el
personal subcontratado. Si hay un problema, si comienzan a hablar o expresar su
malestar, el empleador tiene al menos tres posibilidades para moverlos o
despedirlos sin que sea ilegal. Entonces, hemos logrado instancias de
organización pero de pronto - en el año 2014 por ejemplo - fueron infructíferas
en algunos momentos. Por la rotación finalmente, se fragmentaban los espacios.
Por ejemplo, llegamos a ayudar a organizar hasta a 14 trabajadoras de aseo,
pero finalmente las separaban; algunas veces, como el año pasado, logramos que
construyeran y firmaran un petitorio unas treinta trabajadoras pero hubo un
sapo ahí, que se llevó la mitad de las firmas. Pero este año nosotros tenemos
mucha esperanza de que esto va a triunfar...
F: Respecto
a esta problemática, ¿cómo han sido la respuestas o reacciones por parte del
resto de la comunidad universitaria - en específico autoridades académicas,
funcionarios?
A: Por el
lado de los funcionarios, siempre han
visto que existe un conflicto en torno a la subcontratación, por lo que les
hace bastante sentido todo lo que está pasando. Ahora, ellos tienen otro
problema, que es la falta de organización de su estamento, es una falta de
instancias de participación en la que al final solamente actúa la plana
directiva, que de hecho se ha portado muy bien con nosotros en el trabajo de
darle una solución definitiva a la subcontratación, pero si uno dice que todo
el estamento de funcionarios está plegado a estas instancias sería falso,
porque no es tan factible.
Ahora, eso
no quita que haya trabajadores - antes externos - que están siendo contratados
por la facultad, en el área de guardias, que ahora reciben el nombre de
"auxiliares de mantención"; si estamos potenciando la organización de
estos auxiliares de mantención es para que ellos trabajen para poder solucionar
autónomamente su problemas, porque tienen bastantes, además contribuirían a
dinamizar la organización colectiva de los funcionarios en general. Ahí hay una
tarea importante que va a tener que encarar la ASOFIN - que es la Asociación de
Funcionarios de Ingeniería -, que es cómo relacionar a estos trabajadores
nuevos que están organizándose en torno a sus problemas, y coordinarlos con
esta instancia que ya existe.
F: ¿Y por
parte del estamento académico?
A: Yo
separaría lo que es académicos y lo que es “Torre Central”, que es la instancia
administrativa. Por un lado, la
instancia de los académicos, es heterogénea, pero siempre se ha visto favorable
a ir denunciando la problemática. No les parece permisible que esto pase,
saben de los conflictos por nosotros y muchas veces han estado plegados con
nosotros para firmar petitorios, para hacer trabajos en conjunto, entonces las
problemáticas les hacen eco a ellos.
Pero lo que
tiene que ver con la plana administrativa es totalmente distinto; en este
contexto, en primera instancia durante el año 2014 cuando empezamos a instalar
la problemática, lo que hizo fue negar la existencia del problema; luego,
cuando la problemática ya estaba instalada, se pusieron a la defensiva
argumentando que no podían contratar; después, cuando les dijimos que no
queríamos contratación, sino que se diera una solución completa a la
subcontratación a largo plazo, y que queríamos que se efectuara un estudio en
torno a la subcontratación, dijeron que no les gustaba la idea porque ellos
querían acciones concretas. Entonces, toda
la dinámica de la plana administrativa se ha reducido a dilatar el asunto por
un lado, y darle un encauzamiento en el que no estalle el problema, por otro.
F: Y - si
no te apuro demasiado - ¿qué personajes serían quienes encarnan esa postura?
Dentro de las autoridades más visibles del campus.
A: Yo no
sabría decir si existe "el" personaje", pues rotan los
decanos... por ejemplo cuando hablamos de mesa triestamental, nosotros hablamos
específicamente del decano como contraparte, no es un tema personal contra
"un" decano, sino contra la instancia misma en que la postura del decano tiene que ser, al
parecer, contener y difuminar el problema. En esa lógica la(s) decanatura(s) se
ha(n) relacionado con la mesa triestamental - instancia que nosotros levantamos:
tratar de evitar todos los problemas, no dar solución en principio, e ir
apagando los conflictos.
F: ¿Y
respecto a las respuestas o reacciones por parte de las empresas externas que
prestan servicios al interior de la FCFM? ¿Ha habido alguna interprelación de
ustedes como estudiantes, o desde la facultad, hacia
ellas?
A: Sí,
hemos interpelado, sí. Ahora, el año 2014 no tuvimos muchos diálogos directos
con las empresas. El año pasado nos centramos en seguridad y aseo
externalizados y solamente a principio del año realizamos una interpelación,
entregamos unas cartas a las empresas subcontratistas, a las que respondieron
negando todas las cosas que nosotros hablábamos respecto a temas de abusos laborales,
esa fue la primera interpelación. Una segunda interpelación que se hizo, fue
nuevamente por el tema del trato, abusos, y no pagos de sueldos; esto fue a
nivel de cartas, nosotros hablábamos a través del vice decano, él mostraba una
postura y preguntaba a las empresas respecto a lo que pasaba.
Ahora,
durante este año, específicamente con el área de aseo, hubo una dinámica un
tanto distinta, porque apareció un nuevo actor, el "administrador de
contratos" que está viendo específicamente el área de subcontratación, y
en ese caso nosotros hemos tenido discusiones y acuerdos directos con la
empresa de aseo. En este contexto, la
empresa de aseo se ha visto como una empresa mentirosa, irresponsable, y que no
quiere cumplir los compromisos que se adquieren en las instancias en que
nosotros hablamos con ellos. Y eso ha sido terriblemente conflictivo
a la hora de empezar a trabajar, porque cuando hemos tenido que negociar con
ellos, si hay algún compromiso de por medio, ellos empiezan a intentar alguna
manera por atrás de romperlo. Ha sido una dinámica constante de la empresa,
mantener sus privilegios y a pesar de adquirir compromisos intentar evadirlos
por detrás.
F: Alex,
una cuestión que me quedó en el tintero es si podrías explicar sintéticamente
como nace y qué rol ha cumplido la mesa triestamental.
A: Como te
contaba, cuando comenzó este tema de elaborar un diagnóstico y darle una
solución integral al problema, los estudiantes dijeron que había que buscar una
forma institucional de hacerlo, esto fue durante 2014. Entonces nosotros
propusimos reflotar una instancia que se había perdido durante 2013. Ése año
con todo el tema de los guardias se levantó una mesa triestamental de trabajo,
pero sólo se reunió una vez. Planteamos
apelar a esa instancia que ya había existido, para contar con una vía institucional
para solucionar el problema, una mesa de diálogo, compuesta por representantes
estudiantiles, representantes de los funcionarios y directivos académicos.
Esta mesa se convocó por primera vez la segunda semana de junio de 2014,
después de hartas negativas por parte de la facultad para que esto no
ocurriera; o sea, no una negativa, más bien una omisión de respuesta.
F:
Entonces, entendiendo que esa instancia triestamental es reciente, de mediados
del año pasado, ¿cómo definirías a contar de ese hito los conflictos que han
sucedido hasta ahora y cuál sería el
estado actual de la situación (2015)?
A: Lo voy a
responder según los objetivos que nos planteamos a principios de 2014, que era
buscar un diagnóstico respecto a la subcontratación para que hubiera una
instancia objetiva a la cual apelar y poder decir "esto es malo".
Nosotros no teníamos esa opción porque nuevamente cuando hablábamos de
subcontratación cada uno ponía su opinión. Necesitábamos
una base sólida para definir la situación, que implicaba hacer un estudio serio
y concreto al respecto. Después, la idea era proponer una solución, lo que
implicaba que los estudiantes estuvieran súper informados sobre lo que estaba
pasando, y además en paralelo ir resolviendo las problemáticas que pudieran ir
surgiendo. Ya cuando los estudiantes propusieron la instancia triestamental
para contar con un espacio institucional, lo primero que hicimos fue levantar
la idea de un estudio, que no fue una idea creada por nosotros estrictamente
pues estaba como antecedente el estudio en
la USACH realizado por Fundación SOL[5] -
y que lamentablemente se hizo y no se logró nada, en términos concretos.
En esa
instancia empezamos a pedir un estudio, que recién después de cinco meses de
reuniones se logró (5 de noviembre de 2014); a propósito, en esas instancias se
resolvía si era la Facultad de Ciencias Sociales (FACSO) o la Fundación SOL
quienes harían el estudio: finalmente se optó por la FACSO. Ése fue el primer
hito que se logró.
El segundo
hito logrado fue empezar a contratar guardias. Ya se había visto que habían
hartos conflictos en seguridad, y la facultad ya tenía hartos problemas por ese
lado - agudizado obviamente por el conflicto que nosotros estábamos levantando
para mediatizar el tema: molestar al decano, hacer concentraciones etc. - y el
decano empezó a mostrar su voluntad para comenzar a trabajar en pos de una
contratación directa. Así, en esa instancia se declara la posibilidad de
contratar a todos los guardias diurnos como "auxiliar de mantención";
eso empieza más o menos en Enero y es un proceso que todavía no termina.
El tercer
hito que nosotros queremos plantear a largo plazo es el términos de estudio que
está realizando un equipo de la FACSO. Y el último hito tendría que ser
precisamente dar una solución a largo plazo
en base a los resultados del estudio.
F: ¿Y en
términos coyunturales que ha pasado desde Enero hasta ahora?
A: Se
contratan a los guardias como auxiliares de mantención, no se les paga durante
dos o tres meses y es un primer conflicto en la medida que nunca se les dijo
que el trabajo en instancia pública demoraba tanto el pago. Entonces nosotros
empezamos a presionar por el pago y de que tales trabajadores pasaran a
contrata, hechos que muestran que no está regulada la contratación de auxiliares
de mantención.
El segundo conflicto fue precisamente la nueva empresa
de aseo (Master Service), que en primera instancia nos dio ciertas libertades
respecto a elementos que habíamos ganado en la mesa triestamental, como
reuniones con los trabajadores; nos dieron esa licencia pero desde el momento
en que los trabajadores comenzaron a hablar, aquellos que hablaron fueron
despedidos. Esto fue el 26 de marzo de 2015. En el momento que había que
renovar contrato, porque lo que esta empresa hace es hacer contratos a plazo, y
luego hacer anexos de contrato; esto llevaba a que al finalizar el mes se terminaba el contrato,
y estos trabajadores salían. Entonces el segundo foco de conflicto fue proteger
a todos estos trabajadores que habían sido despedidos de forma arbitraria y
precisamente por estar hablando.
El tercer
foco de conflicto, que ha pasado en las últimas tres semanas ha sido la estafa
que ha cometido esta empresa de aseo con sus trabajadores. Porque cuando los trabajadores vinieron acá a
trabajar, se les dijo que les iban a pagar $270.000 líquidos, pero jamás se les
dijo que esto estaba sujeto a bonos de gratificación. Estos bonos implican que
al trabajador se le paga $32.500 por asistir todos los días al trabajo, y si
faltan un día pierden ese monto, que eran parte del sueldo líquido
inicialmente prometido ($270.000) y además pierden el día de trabajo, entonces
al final pierden más o menos $40.000. Eso es algo que ellos no tenían
considerado y cuando se les dijo, todos los trabajadores empezaron a reclamar.
En ese
momento, los trabajadores estaban
también molestos por la presencia de dobles turnos, por sobrecarga laboral que
no estaba siendo remunerada y porque no habían implementos necesarios para
trabajar, actualmente ni siquiera cuentan con cloro para limpiar. Entonces,
qué pasa, los trabajadores se acercan a la comisión y nos cuentan todo el
conflicto; decidimos hacer una carta firmada por todos los trabajadores, en una
forma de petitorio para presentársela a la empresa el lunes 13 de abril de este
año, dando plazo hasta el día siguiente para que la empresa respondiera. La
empresa no dio una respuesta, por lo que los trabajadores decidieron que el día
miércoles (15 de abril) iban a parar.
Al momento que pararon se les amenazó que iban a ser despedidos:
supervisores empezaron a sacar puntualmente a trabajadores del grupo de treinta
que estaban para amenazarlos con tal posibilidad. Luego de toda eso, de las
pasadas del supervisor apuntando trabajadores, veinte trabajadoras se mantienen
y ellas empiezan a emplazar a decano a que baje y que les dé solución a los
problemas. Cuando eso ocurre, el decano conoce todo el problema, y como
grabamos todo lo ocurrido,[6]
esto se mediatiza a nivel de toda la comunidad universitaria, como no
había sucedido antes; no hay precedentes al menos desde el 2012 de que haya
habido un paro de trabajadoras, por tanto esto caló súper hondo tanto en
profesores, funcionarios y estudiantes.
Cuando se evidenciaron todas las razones que estaban apelando los
trabajadores, que era un piso mínimo de condiciones laborales, uno se da cuenta
de la miseria de la que estamos hablando, y es algo que cala súper
hondo en las emociones. A esas trabajadoras se las amenazó con despidos el
mismo día, y eso se hace efectivo precisamente el día de ayer (20 de abril de
2015), cuando se les da aviso mediante una carta a su casas, que se terminaba
el contrato y que estaban despedidas a contar del día 30 de abril. Nosotros
tuvimos hoy una mesa de negociación donde se logró anular esa decisión de la
empresa, y las trabajadoras siguen trabajando acá y está el compromiso de la
empresa, que hay que verificar porque esta empresa mentirosa no ha dado ninguna
garantía, si bien escribió una carta, nadie sabe lo que puede pasar, de que
ellas van a seguir después del 30 de abril trabajando, lo que implicaría que al
fin tendrían un contrato indefinido, y nuevamente eso levanta el tema que
tendrían más holgura para organizarse.
F: Desde su
perspectiva, ¿la problemática de la subcontratación es transversal a todos los
espacios (campus, facultades, institutos) de la universidad de Chile?
A: Nosotros
tenemos patente que no sólo es
transversal a la Universidad de Chile, sino que es transversal a todas las
universidades. Una de las cosas que tenemos claras es que este conflicto no
es solamente local, sino que en función de lo que nosotros hagamos acá, pueden
lograrse muchos logros en otros espacios.
F: Y en ese
sentido ¿Creen que se podría levantar un movimiento parecido en otras
facultades de la Chile, o universidades eventualmente? ¿Tienen noticia, o han
tenido contactos con experiencias similares en otros espacios?
A: Sí.
Obviamente esto se puede levantar en cualquier espacio, nosotros no somos
ningunos iluminados. Lo que nosotros sentimos que es la clave en verdad es que
trabajamos el problema no a través de las dirigencias, sino que a través de las
bases estudiantiles. Llegamos a las asambleas dando un diagnóstico sobre el
conflicto, discutiéndolo y buscando que le hiciera sentido a todos los
estudiantes, y en función de eso empezamos a trabajar, de todos los estudiantes
para arriba.
Entonces hay algo muy claro cuando uno quiere
problematizar una situación y es que uno no puede partir como una opción clara
de lo que es el mundo e imponérsela al resto, sino que a cada uno le tiene que
hacer sentido: y precisamente a todos les hizo y hace sentido las indignidades
que pasaban y pasan acá. Esto de hecho tiene que ocurrir en otros
espacios, pero en la medida de lo posible con trabajo serio y bien coordinado
con los estudiantes y los trabajadores.
Segundo,
nosotros sí tenemos precedentes de que se han levantado instancias similares,
por lo menos en la USACH. También hemos
sabido que hay ciertos espacios de la Chile también hay otros espacios de
trabajo; en filosofía, aunque sabemos que no tratan específicamente el
subcontrato sino de los trabajadores a honorarios, y en derecho conocemos gente
que si bien no han logrado concretar cosas efectivas, han levantado iniciativas
súper valorables.
F: ¿Tienen
noción de la existencia de una mesa triestamental en torno a condiciones laborales que cuenta
con representantes de los tres estamentos (Vicerrectoría Económica, FENAFUCH y
FECH) de la Universidad de Chile? ¿Se han vinculado o piensan vincularse con
tal espacio?
A: Sí,
nosotros tenemos conocimiento de esa instancia. Pero no hemos logrado una
instancia de coordinación con la gente que está en ese espacio. Precisamente el
año pasado nosotros levantamos una propuesta de trabajo, la cual no fue
escuchada; nosotros se la presentamos al entonces delegado de bienestar - Axel
Gottschalk me parece - que era básicamente lo que te decía recién sobre articular
los espacios locales, precisamente por la heterogeneidad existente entre las
facultades: que cada comisión de
subcontrato de los centros de estudiantes trabaje y organice esto con los
estudiantes, y en función de eso trabajar un espacio de universidad, y precisamente
no apelar al rector para que él diga "sí, se acaba el subcontrato",
porque eso no va a pasar. Nosotros sabemos que si el rector dice eso,
probablemente va a tener muchos conflictos con los decanos, y es precisamente
lo que está pasando con el referendum: si bien el rector tiene una
propuesta, el consejo de decanos tiene otra. Por eso, la organización y presión
local, en cada espacio, hacia las decanaturas es un punto medular en esta
línea.
F:
Continuando con la última idea, ¿la problemática de la subcontratación se
relaciona de algún modo con las discusiones sobre democracia universitaria que
se están abriendo desde el senado universitario, al interior dela Chile durante
este 2015?
A: Sí.
Nosotros estamos acá hablando de derechos mínimos, que tienen que ser
transversales a todas las personas que forman parte de la universidad. Por
tanto, el democratizar los espacios es
también democratizar el trabajo, y eso implica revelar todas estas aristas.
Esto tiene mucho sentido en el contexto general de la universidad que es cómo
entendemos la universidad; cómo un espacio de producción de conocimiento, o un
espacio donde las personas puedan ser íntegras a través del conocimiento.
F: Ya para
finalizar, considerando el despliegue y la mediatización del conflicto en torno
a la subcontratación acá en FCFM ¿cuál creen que debería ser el rol de los
diferentes actores al interior de la universidad frente a esta situación,
asumiendo que es generalizada?
A: Creemos
que el rol de los actores está en buscar una solución efectiva, y tal solución
no puede darse en un espacio único, por tanto, ambas partes - como nosotros intentamos
trabajar en la mesa triestamental - tienen que trabajar coordinadamente para
concretar una solución a largo plazo: los espacios locales organizados y algún
tipo de instancia institucional de nivel global. ¿Qué le compete a cada
espacio? precisamente lo mismo, generar espacios de discusión, entender el
problema y finalmente proponer formas para resolverlo, pero proponer en
conjunto y no en dimensiones separadas, apelando nuestra capacidad de ejercer
una opinión y tener una capacidad de decisión.
Comisión Subcontrato FCFM.
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https://www.facebook.com/comsubcontrato?fref=ts
Grupo de Estudios Interdisciplinarios del Trabajo
FACSO.
https://www.facebook.com/geit.facso?fref=ts
http://geitfacso.wix.com/geit-facso
geitfacso@gmail.com
https://www.facebook.com/geit.facso?fref=ts
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geitfacso@gmail.com
[3] Síguenos en Facebook: https://www.facebook.com/geit.facso?fref=ts; encuentra esta entrevista, y más contenidos de
interés en: http://geitfacso.wix.com/geit-facso; para contactarte
con nosotros, puedes escribirnos al email: geitfacso@gmail.com.
[4] Estudiante de sociología de
la Universidad de Chile, cuarto año. Miembro del GEIT.
[5] Informe Fundación SOL sobre
el subcontrato en la USACH (https://es.scribd.com/doc/263062068/Informe-Fundacion-SOL-Subcontratacion-en-La-USACH-2014)
[6]
Un recuento audiovisual
de lo ocurrido aquel día puede encontrarse en el siguiente enlace: https://www.youtube.com/watch?v=9eOeEmjDQgw.
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