lunes, 8 de septiembre de 2014

La Sociología es un Deporte de Combate


“Lo que el mundo social hizo, el mundo social, 
armado de ese saber, puede deshacerlo”
Pierre Bourdieu.

Siempre aquellos que estudiamos sociología no encontramos con alguien que nos hace dos preguntas incómodas: ¿Qué es la sociología? ¿Qué hace un sociólogo?

Es el momento de las vergüenzas, las palabras dubitativas y las respuestas ambiguas: “Bueno, depende…” “Bueno, de todo un poco…”. Y claro, nos quedamos con las ganas de defender nuestra elección y demostrar que para algo servimos (que no somos como Fernando Villegas, y tampoco somos encuestadores glorificados).

Es por eso que me parece absolutamente recomendable este documental, que hace un seguimiento de la cotidianeidad profesional del sociólogo francés Pierre Bourdieu. Si bien lo que allí menos encontraremos será una definición de manual de la sociología en tanto disciplina, nos permite ver a un sociólogo en acción: desde su oficina, dictando clases, asistiendo a conferencias, actos masivos, charlas a estudiantes, presentaciones de libros, viajes y coloquios con organizaciones sociales y políticas.

Ya que siempre será difícil responder a ese incómodo par de preguntas de más arriba, desde nuestra propia (in)experiencia, siempre podremos referirnos a lo que hace otro. ¿Y qué hace, Pierre Bourdieu?: bueno, me gusta decir que lo que este francés hace es meterse en los lugares que molestan, haciendo preguntas incómodas, interrogando aquellos sentidos comunes que tienden a anquilosarse frente a una realidad social que – las más de las veces – no nos sorprende como debería.
Su vasta trayectoria de investigación lo llevó a cuestionar (como se puede ver en la película) la igualdad de oportunidades ofrecida por el sistema educacional francés (caso ejemplar de republicanismo burgués), la naturalización de las relaciones de género, la universalidad de la cultura, o la primacía de un fuerte economicismo en el (entonces naciente) sistema económico de orientación neoliberal.

Y bueno, más que elogiar a la calidad cinematográfica del presente material(cosa que no me atrevería a hacer)  me gustaría dejar planteada la necesidad de una imaginación sociológica, que no es propiedad privada de las sociólogas y sociólogos. Más allá de las particularidades de cada disciplina u oficio, me parece pertinente rescatar este tipo de imaginación que busca desentrañar las lógicas que reproducen, en el nivel de las relaciones entre nuestros iguales, realidades que no son naturales ni necesarias, sino sociales, y por tanto modificables.

En este sentido, quizá lo particular de una disciplina como la sociología (que se define, con éxito o no, como científica) es el intento por trascender de manera sistemática, rigurosa y con fundamento empírico, el sentido común que orienta nuestra práctica cotidiana, y que muchas veces se constituye como una verdadera barrera simbólica que no nos permite imaginar, o soñar siquiera, con la posibilidad de construir un mundo mejor.

Pierre Bourdieu nos propone una forma bastante particular, y yo diría heterodoxa de comprender a la sociología: “A menudo digo que la sociología es un deporte de combate, se utiliza para defenderse, y no se puede utilizar para dar golpes bajos.”. Y es que no es demagogia lo que hacemos, es más bien el despliegue de un potencial de imaginación fundamentada que, hoy, es más necesario que nunca.
Para quien se interese por un acercamiento introductorio a la biografía, conceptos centrales y obra de este sociólogo, recomendamos, de Pablo Tovillas (2010) Bourdieu: Una introducción. Editorial Quadrata, Buenos Aires.

Pero advertimos, no se pase el rollo: la sociología es necesaria, pero no es una panacea, con ella puede hacerse cualquier cosa. ¿Moraleja?: no confíe en tipos como Tironi. ¿No entiende a qué (o a quién), me refiero? Bueno, como bonus track, les dejo el siguiente link.

Por si alguien se interesa, algunos trabajos que podemos mencionar, destacables porque escudriñan en temas que escapan a aquellos tradicionalmente trabajados por la sociología son: “Los Herederos”, “La Distinción. Criterio y bases sociales del gusto”, “La fotografía, un arte intermedio” y “El oficio de sociólogo.”

Reseña publicada por Kinetoscopio Cine.


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